Guía para sobrevivir a una clase de Hot Yoga

¿Alguna vez has practicado Hot Yoga? Como lo dice su nombre, es una clase de yoga dictada en un ambiente especial a altas temperaturas, que pueden rondar desde los 30 a 42°C. Este estilo tiene muchísimos practicantes debido a sus beneficios: mayor flexibilidad, mayor actividad cardiovascular y alta quema de calorías, entre otros.

Sin embargo, te imaginarás que en verano las temperaturas suben aun más y esto puede traer algunas incomodidades como exceso de sudor y deshidratación. A continuación los mejores tips para disfrutar de la práctica:

  1. Lleva una toalla. De preferencia, que cubra todo el mat. Venden toallas especiales para yoga, pero puedes usar una de playa, de baño o de microfibra. La puedes usar para secarte el sudor y como antideslizante.
    • ¿Tu mat resbala mucho? Si no tienes una toalla, prueba a colocar una cuerda paralela al borde de adelante del mat, a la altura de donde se apoyan tus manos.
    • Si te sigues resbalando, no olvides usar el core en posturas como perro mirando hacia abajo. Esto evitará que todo tu paso caiga sobre tus manos.
  2. Hidrátate antes y después de tu clase. Lo ideal durante la práctica de yoga es no ingerir alimentos ni bebidas, por lo que lo recomendable es mantener una buena hidratación a lo largo del día y después de la práctica. Recuerda que las frutas también sirven para esto, pues además de su alto contenido de agua contienen vitaminas y minerales que repondrán los electrolitos perdidos a través del sudor.
  3. Usa vestimenta adecuada. Por un lado, te recomiendo utilizar ropa con tecnología de absorción de sudor en vez de tela de algodón, especialmente si no te gusta sentir la ropa mojada. Por otro lado, y en base a mi experiencia, piénsalo dos veces antes de usar shorts. Las leggins largas absorben el sudor de las piernas, por lo que gotea menos al mat. Además, al momento de realizar balances (como bakasana o postura del cuervo) puede ser peligroso el contacto directo de la piel del brazo con la pierna.
  4. Lleva una muda de ropa. Por más que haga calor, no es recomendable quedarse con la ropa mojada después de clase. Con una muda de ropa evitarás resfríos.
  5. Controla tu respiración. Esta debe mantenerse consciente y relajada a lo largo de toda la práctica. En muchas clases se practica la respiración ujjaji o victoriosa (la que suena como Darth Vader), pero esta puede darnos mucho calor y/o mareos, en cuyo caso se recomienda no realizarla.
  6. Tómate un descanso. Recuerda que tú eres quien mejor conoce tu cuerpo. Si en algún momento la sensación de calor se vuelve muy intensa, puedes descansar en balasana o postura del niño.

Espero que estos tips te sirvan. Recuerda que, después de todo, la idea es que te puedas concentrar en tu clase y te enfoques en disfrutarla.

Author: Gabriela Cockburn

Amo hacer deporte y soy corredora de media maratón. Buscando complementar mis entrenamientos llegué al yoga en el 2013 y me enamoré tanto de esta práctica que decidí certificarme como instructora para poder compartirla. Para mí, el yoga, más que una actividad física, es una herramienta de transformación personal muy poderosa.