¿La idea de despertarte más temprano de lo que ya lo haces para ir a entrenar es solo parte de una pesadilla para ti? Es hora de que cambies esa mentalidad. Sobre todo si tu resolución de año nuevo fue mejorar tu estado físico y de salud.
Mira, cuando entrenas en la mañana, comienzas el día con fuerza. Si lo dejas para después, las cosas del trabajo, de la casa y del día vienen por ti y pierdes la motivación con la que despertaste. Y aparte de eso, una rutina mañanera te ayuda a dormir mejor en la noche, a tener menos antojos, a perder peso extra y a sentir que cumpliste con algo ni bien empezó el día.
Todo lo que necesitas hacer para crear esa costumbre, a continuación.
COMIENZA CON POCO
No necesitas arrancar con intensas rutinas de 90 minutos a las 5am. Comienza con media hora de ejercicio para ir acostumbrándote al hábito. No es tan complicado despertarte media hora antes que de costumbre y salir a correr unas vueltas, hacer unas planchas y unas sentadillas antes de alistarte para ir a trabajar.
Con el tiempo, ya le agregarás tiempo e intensidad a tus entrenamientos. Pero comienza con algo que puedas cumplir consistentemente.
Y si tu problema es que comienzas a trabajar muy temprano y no te da el tiempo para hacer todo, aprovecha tu membresía en Fitness Pass y entrena cerca a tu trabajo, cerca a tu escuela, cerca a tu casa o a donde las obligaciones te lleven.
No habrá problema, ya que cuentas con centros de entrenamiento afiliados alrededor de toda la ciudad.
PREPÁRATE DESDE LA NOCHE ANTERIOR
Todo lo que vayas a necesitar en la mañana, alístalo en la noche antes de dormir. Esto incluye tu ropa deportiva, toalla, agua y demás. Hasta podrías dormir en esas prendas para pararte y sudarlas, después.
Y jamás olvides preparar tu desayuno y almuerzo para tener cero apuros en la mañana siguiente.
DUERME LO SUFICIENTE
Que te sientas bien o mal en la mañana al despertar depende mucho de cómo hayas dormido la noche anterior. Define tu hora ideal para dormir tus 7 horas y comienza a apagar todo y acostarte desde una hora antes. Si lo cumples, ya no necesitarás apagar tu alarma en la mañana porque habrás descansado lo suficiente.
NO TOQUES ”POSPONER” EN TU ALARMA
Deja tu teléfono lejos de tu cama antes de dormirte pero lo suficientemente cerca para que escuches su alarma. Cuando suene, párate y prende la luz o pon música para que realmente sientas que es hora de arrancar el día.
NO TE DISTRAIGAS
Es fácil tomar tu celular y apagar la alarma. Revisar tu email, abrir facebook y perderte en ese mundo por un rato. Ese rato es el que matará el tiempo de tu entrenamiento. Si es que lo necesitas, ponle modo avión y realmente cumple con la rutina.
COME SOLO SI REALMENTE QUIERES HACERLO
No a todos nos va bien entrenar con el estómago lleno. Deja de forzarte a hacerlo. Una fruta o un pequeño licuado te darán la energía para la rutina. Pero un buen desayuno después es obligatorio.
ESCOGE LAS CANCIONES CORRECTAS
Motívate con música que te de ganas de moverte y empezar bien el día. Puedes escuchar podcasts informativos, también. Pero evita las noticias y la farándula. Ambas sirven de nada. Comienza bien el día.
MANTENTE EN EL HÁBITO
No pasará mucho tiempo para que te enamores de tu nueva rutina y la cumplas sin falta alguna. Si puedes ordenarte y realizar todas esas tareas al pie de la letra, verás cuán fácil es entrenar en las mañanas y tener jornadas muy productivas.
Author: Juan Diego Aguilar De La Riva
Apasionado del deporte y la buena alimentación. Entrenador y nutricionista deportivo certificado. Dueño y cofundador de proyectos como s’etre; centro de entrenamiento y marca de suplementos y ropa deportiva y Q’ari; snack de comida saludable. Involucrado en la industria del fitness desde hace más de una década y autor del libro/manual ”Tu mejor versión: Guía rápida en nutrición y deporte para el ciudadano común”.